México tiene una ventana de oportunidad de máximo tres años para que llegue la inversión de manufactura al país.
Del total de nearshoring que se desarrollará en México, 85% correspondería a las empresas que forman parte del programa de la Industria Manufacturera, Maquiladora y de Servicios de Exportación (IMMEX).
Estimó Luis Hernández, presidente de Index Nacional, organismo que agrupa a dichos negocios.
Las empresas que cambian de Asia a México quieren exportar a su principal mercado de consumo, Estados Unidos, sin presentar mayores contratiempos por posibles rupturas en las cadenas de suministro que se vean afectadas por las largas distancias, como ocurrió con China.
Actualmente, 62% de la exportación nacional proviene de la industria manufacturera.
Llegar a 85% será fácil ya que IMMEX se creó para impulsar las exportaciones de empresas en México, manifestó Hernández.
Los principales sectores de la industria manufacturera en los que se concentraría el nearshoring serán:
- Automotriz,
- Electrónico,
- Médico,
- Aeroespacial,
- Energía.
Sin embargo, Hernández advirtió que hay una ventana de oportunidad de máximo tres años para que llegue la inversión.
El 15 por ciento restante del nearshoring en el País sería para otras industrias, como empresas proveedoras de IMMEX.
Primero, México requiere atender varios aspectos básicos, es decir, para este desarrollo se demanda: estado de derecho, energía eléctrica, infraestructura (en carreteras y aduanas).
Así como un gobierno pronegocios, regulaciones ambientales que cuenten con estándares internacionales y el desarrollo de talento necesario para las condiciones actuales del mercado.
Con la relocalización se busca que las cadenas de proveeduría que venían de Asia se concentren de manera regional, para el caso del país se conformarían a partir de las naciones que integran el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC).
“Lo que se está buscando con el nearshoring es tener cadenas de valor del T-MEC más que mexicanas”, afirmó Hernández.
De ahora en adelante, muchos movimientos comerciales van a ser a partir del fenómeno de regionalización.
Por lo que se va a buscar proveeduría dentro del mismo bloque al que pertenezcan los países, en el caso de Norteamérica sería entre Estados Unidos, Canadá y México, destacó.