El futuro del trabajo en México
Se requiere una acción colectiva por parte de la sociedad y el gobierno para reentrenar y perfilar nuevamente a millones de trabajadores mexicanos, preparándolos para la transición hacia empleos más especializados y complejos.
El mercado laboral mexicano enfrenta toda una serie de desafíos, a la par de oportunidades, que sociedad y gobierno deben resolver y aprovechar de forma ágil.
Alejandro Salafranca, titular de la Unidad de Trabajo Digno de la Secretaría del Trabajo y Previsión Social del Gobierno de la República, señaló la inminente destrucción masiva de empleo manual en un horizonte que abarca entre 9 y 15 años.
Al participar como orador en la 4ta. Edición de la Human Resources Summit 2024 en México, señaló que esta transformación laboral estará marcada por la desaparición de empleos mecanizados y automatizables, que requieren menos habilidades y formación.
Sin embargo, simultáneamente se crearán millones de nuevos empleos con demandas más sofisticadas, que requerirán mayores niveles de capacitación, formación y especialización.
El desafío inherente a esta transición radica en el riesgo de un desequilibrio entre la oferta y la demanda de mano de obra calificada.
Salafranca adviertió sobre la posibilidad de que, a medida que los empleos tradicionales desaparezcan, haya una creciente cantidad de personas sin trabajo y aún no calificadas para ocupar los nuevos roles disponibles en las industrias emergentes, particularmente en el ámbito tecnológico.
En respuesta a esta compleja dinámica, Salafranca subrayó la necesidad de una acción colectiva por parte de la sociedad y el gobierno. Propuso una “ofensiva” para reentrenar y perfilar nuevamente a millones de trabajadores mexicanos, preparándolos para la transición hacia empleos más especializados y complejos. Este proceso, si se lleva a cabo de manera efectiva, podría representar un desafío fabuloso para el país. Sin embargo, Salafranca advirtió sobre los riesgos de la inacción, señalando que un fracaso en adaptarse al ritmo de cambio podría resultar en un desequilibrio peligroso para la estabilidad del mercado laboral mexicano en la próxima década.