El uso de la biometría mejora la experiencia y la protección en el sector al identificar la actividad fraudulenta con alto nivel de precisión.
El sector financiero es víctima del 23.3% de los ataques de phishing, sobre todo por la cantidad de información y recursos económicos a los que tiene acceso.
De ahí que, los bancos y las fintechs necesiten fortalecer su estrategia de ciberseguridad contra el fraude y el robo de credenciales.
David López, vicepresidente de ventas para Latinoamérica de Appgate, dijo que las instituciones financieras enfrentan un doble reto:
- Implementar soluciones robustas de ciberseguridad que contrarrestan adecuadamente a las estrategias de los delincuentes y,
- Brindar una experiencia cómoda y segura a la gran cantidad de clientes que se han sumado a sus servicios digitales.
“La industria de la ciberseguridad ha diseñado e implementado herramientas biométricas con el fin de superar satisfactoriamente estos dos desafíos, dando lugar a métodos mucho más eficientes que los clásicos y obsoletos de usuario y contraseña”, explicó.
Más soluciones biométricas
De acuerdo con Appgate, una de las mejores herramientas para evaluar los inicios de sesión y compararlos con el comportamiento típico del usuario es la biometría del comportamiento.
Esta aprovecha la información de cada interacción de las personas para construir un modelo preciso de verificación.
Si el comportamiento actual es el rutinario, el sistema es capaz de autorizar el inicio de sesión sin necesidad de una validación adicional. Si detecta alguna anomalía puede solicitarse una autenticación más avanzada.
Entre los beneficios de las nuevas formas de autenticación se encuentran:
Trámites ágiles y fluidos. El tiempo que gastan los clientes para acceder a sus cuentas y realizar cualquier transacción o movimiento es de gran valor y determina la experiencia y efectividad del servicio que se presta.
Prevención de la suplantación. Uno de los puntos clave para el sector financiero y la ciberseguridad, es la suplantación de la identidad, ya que los ciberdelincuentes roban la información personal o utilizan métodos de deepfake para hacerse pasar por usuarios ilegítimos.
Disminución del robo de credenciales. En la Deep y Dark Web existe un mercado de credenciales, como usuarios y contraseñas, de millones de personas en todo el mundo. Este tipo de autenticaciones han dejado de ser seguras y ponen en riesgo las cuentas bancaria, la información personal y hasta los sistemas empresariales.
Con un modelo biométrico que se aleje de estos métodos obsoletos, el robo y comercialización de credenciales disminuirá, junto al riesgo al que se enfrentan las personas y entidades financieras.
Métricas e informes. Este tipo de autenticaciones, con más herramientas para el control de la seguridad de los usuarios, posibilitan recopilar información detallada en forma de métricas en los informes sobre comportamientos sospechosos y puntaciones de riesgo relacionadas con los inicios de sesión, permitiendo a las entidades actuar a partir de resultados mucho más eficientes.
López mencionó que la implementación de nuevas y mejores formas de acceso, como la biometría del comportamiento y de otras alternativas de verificación han reducido la tensión que generan otros métodos intrusivos de autenticación.