El sector de la robótica atraviesa una etapa de bonanza y optimismo como revelan los datos del 2022 World Robot Report de la International Federation of Robotics (IFR).
En 2021 se superó por primera vez el medio millón de instalaciones de nuevos robots industriales y se estima que en 2025 se puedan alcanzar casi las 700.000 nuevas unidades instaladas al año.
El World Robot Report de la International Federation of Robotics (IFR) recoge un ranking con las regiones y países con mayor densidad robótica del mundo.
La región Asia encabeza la clasificación con 381.000 unidades, seguida de Europa con 84.000 unidades y en América de 51.000 unidades.
Los 5 países más automatizados del mundo son: China, Japón, Estados Unidos, Corea y Alemania.
Nuestro país ocupa el noveno lugar a nivel mundial en instalación de robots para la industria, con una capacidad instalada de 5,400 unidades de robots en las industrias, lo que representa un crecimiento interanual del 61%. Mientras que las inversiones en este sector ascendieron a 1.63 mil millones en el primer trimestre del 2023.
“En México, la robótica se ha ganado en poco tiempo un puesto relevante dentro de la industria, podemos decir que es una historia de éxito, ya que se distingue por tener cadenas de valor industrial que están en auge en la industria aeroespacial, automotriz, electrónica, TIC, metalmecánica, entre otros, los cuales ofrecen oportunidades para adoptar robótica automatizada de última generación”, destacó Francisco Castañeda, director general de RoboRAVE International y presidente del Clúster de Robótica en México.
Estos datos confirman que, en la era actual de avances tecnológicos rápidos e innovación continua, las empresas industriales se enfrentan a la creciente necesidad de adaptarse y optimizar sus procesos de producción.
Una herramienta que ha demostrado ser crucial en esta búsqueda de eficiencia y competitividad es la implementación de robots industriales.
Estas máquinas automatizadas no solo agilizan las operaciones, sino que también brindan ventajas significativas en términos de calidad, seguridad y flexibilidad.
México es un país con una larga trayectoria en el sector automotriz, el cual es uno de los más automatizados y familiarizados con la robótica, no por nada México es el cuarto exportador de vehículos ligeros y el sexto productor a nivel mundial, el quinto productor global de autopartes, el más competitivo en América para la manufactura aeroespacial y el octavo exportador de dispositivos médicos.
Y con la llegada del nearshoring, el sector de la robótica en México puede verse beneficiado aún más:
- Proximidad geográfica
- Mayor flexibilidad y adaptabilidad
- Mejora en la calidad y la innovación
- Reducción de riesgos
“La IA y la robótica tienen un impacto significativo en la economía de los países al impulsar la eficiencia, la productividad, la innovación y la creación de empleo en diversos sectores. Estas tecnologías ofrecen beneficios tangibles que contribuyen al desarrollo económico y al bienestar de las sociedades”, puntualizó Castañeda.
Los sectores en los que se ha registrado una mayor demanda e instalación son:
- Electrónica (137.000);
- Automoción (119.000);
- Metal y maquinaria (64.000);
- Plásticos y productos químicos (24.000);
- Alimentación (15.000).
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Si tus clientes invertirán en este tipo de recursos, considera plantearles cinco argumentos sólidos que respaldan la inversión en robots industriales.
1. Aumento de la Eficiencia Operativa:
La automatización a través de robots industriales permite realizar tareas repetitivas y monótonas con una precisión y velocidad incomparables. Esto se traduce en un aumento significativo de la productividad y eficiencia en las líneas de producción. Los robots pueden trabajar las 24 horas del día, los 7 días de la semana, sin fatiga ni interrupciones, lo que se traduce en una producción constante y sin fluctuaciones. Al liberar a los trabajadores humanos de las tareas repetitivas, las empresas pueden redirigir sus recursos hacia actividades de mayor valor agregado, como la innovación y el desarrollo de productos.
2. Mejora de la Calidad y Consistencia:
Los robots industriales están programados para realizar tareas con una precisión milimétrica y una repetibilidad constante. Esto garantiza una calidad uniforme en cada producto fabricado, eliminando los errores humanos inherentes a las operaciones manuales. Además, los robots son capaces de realizar inspecciones y pruebas de calidad en tiempo real, lo que reduce la posibilidad de defectos y disminuye los costos asociados con productos defectuosos.
3. Mayor Seguridad en el Lugar de Trabajo:
La automatización con robots industriales puede contribuir significativamente a la seguridad en el entorno laboral. Al asumir tareas peligrosas o potencialmente lesivas para los trabajadores, los robots reducen el riesgo de accidentes y lesiones. Esto no solo protege a los empleados, sino que también disminuye la exposición de la empresa a reclamaciones por accidentes laborales y los costos asociados.
4. Flexibilidad y Adaptabilidad:
Los robots industriales modernos están diseñados para ser altamente flexibles y programables. Pueden ser reconfigurados y reprogramados para realizar diferentes tareas en un corto período de tiempo. Esta versatilidad permite a las empresas adaptarse rápidamente a cambios en la demanda del mercado o en la producción de nuevos productos, lo que es esencial en un entorno empresarial en constante evolución.
5. Ahorro de Costos a Largo Plazo:
A pesar de la inversión inicial en la adquisición e implementación de robots industriales, a largo plazo, esta inversión puede generar ahorros sustanciales. La automatización reduce los costos laborales asociados con tareas repetitivas y permite un uso más eficiente de los recursos. Además, la disminución de defectos y la mejora de la eficiencia operativa conducen a una reducción de los costos de retrabajo y garantía.
Satisface la demanda
La inversión en robots industriales es una estrategia inteligente para maximizar la eficiencia y la competitividad en el entorno industrial actual.
Estos argumentos destacan cómo los robots industriales pueden transformar la producción, impulsar la calidad y seguridad, y generar ahorros a largo plazo.
Al adoptar tecnologías avanzadas como esta, las empresas están preparadas para enfrentar los desafíos y oportunidades del futuro con confianza y éxito.