Durante 1983, Printaform inició la fabricación de computadoras compatibles con IBM PC. Esta empresa ya tenía una historia bien cimentada en México y, muy en particular, en formas preimpresas para oficinas y algunos otros componentes.
Printaform fue fundada en 1961 por el C.P. Jorge Espinosa Mireles y se convirtió en una marca de referencia en la República Mexicana.
Para 1974, Printaform se embarcó en la fabricación de calculadoras, cajas registradoras y aparatos afines, por lo que la electrónica no le era ajena.
Las computadoras Printaform se convirtieron en una de las marcas más vendidas de equipos de cómputo para la productividad y de uso personal en toda la República Mexicana, al grado que el propio Bill Gates se reunió con don Jorge Espinosa para firmar el convenio de integración de MS-DOS en Español.
Printaform siguió fabricando computadoras hasta inicios de la década de los años 2000.
Si bien la firma del TLCAN afectó de forma importante sus ventas, la empresa con su planta robotizada todavía aguantó, cuando menos, unos 10 años en producción de este tipo de aparatos.
En la actualidad, Printaform continúa en operación con diversas gamas de productos, entre los que se incluye una línea de calculadoras de distintos tipos.
Es triste recordar que en la primavera de 1992, don Jorge sufrió un secuestro que afectó seriamente a la empresa. Sin embargo, don Jorge salió avante y Printaform continúa en operaciones hasta nuestros días. don Jorge dio por terminada su aventura de vida el 9 de enero de 2021.
Nota al margen: En 1983 surgieron una serie de marcas nacionales mexicanas fabricantes de computadoras, como Printaform, Televideo, Denky Corona, Pine, Franklin y Electrón, debido al bloqueo en la importación.
Para esos entonces, entró en vigor el Plan de Fomento a la Industria Eléctrica y de la Computación, mismo que impulsaba que las computadoras distribuidas en la República Mexicana tuvieran un alto porcentaje de componentes nacionales.
De este grupo de fabricantes, fue, sin duda, Printaform la que más se distinguió, al grado de que, todavía bien entrada la década de los años 90, Printaform se encontraba por encima de empresas como IBM, Unisys y Compaq.