A pesar de que en México carecen las pistas de hielo para el alto rendimiento, Donovan Carrillo dio ayer uno de sus saltos más arriesgados y después de 14 años de carrera se convirtió en el primer mexicano en clasificar a la final de patinaje artístico en una justa olímpica, en Beijing 2022 como escenario.
Sobre el hielo mostró determinación victoriosa, suficiente resistencia y gracia que enloqueció a una multitud conformada por 200 mil personas conectadas que vieron en vivo su participación en el programa corto, donde cautivó con su presencia en la pista del Estadio Cubierto de la Capital.
Con una puntuación total de 43.08 en elementos técnicos, 36.61 en presentación y sin deducciones sumó un total de 79.69 puntos, una marca personal, y avanzó al programa libre en la posición 19 de 30 participantes, siendo el único latinoamericano.
“Es un honor que mi País se sienta orgulloso de mí, es algo que me motiva mucho y en el programa libre voy a vivir el momento sin olvidar dar lo mejor de mí que he trabajado con mi entrenador Gregorio Núñez”, dijo a Marca Claro.
Portó una prenda con alrededor de 17 mil cristales que fue diseñada por el tapatío Edgar Lozano y exhibió un programa prácticamente limpio, sin caídas y sin grandes fallos pese a la complejidad técnica de sus rivales.
Te puede interesar: ¿Qué tecnologías se utilizan en los Juegos Olímpicos de Tokio 2020?
El patinador salió octavo en el Grupo 2 y ejecutó el programa corto con la melodía “Black Magic Woman” y “Shake it”, de Carlos Santana, con siete saltos obligatorios durante la rutina.
Con su presentación el tapatío rompió una sequía de 30 años en esta disciplina en la que México no tenía un representante desde la edición de Albertville 1992, con Ricardo Olavarrieta y Mayda Navarro.
Mañana en el programa libre se definirán las medallas desde las 19:35 horas, tiempo del Centro de México, y usará como melodías “Perhaps, Perhaps, Perhaps”, de Daniel Boaventura y Carlos Rivera, “Sway” de Dean Martin y “María” de Ricky Martin.