El año 2023 fue particularmente devastador para el sector del transporte carretero, registrando 9,181 casos de robo, de los cuales 7,862 fueron violentos.
El robo de mercancías en tránsito se ha convertido en un problema crítico en México, generando un impacto negativo significativo en la economía del país y evidenciando una tendencia delictiva en aumento en toda Latinoamérica.
Datos del Secretariado Ejecutivo del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SESNSP), indican que el año 2023 fue particularmente devastador para el sector del transporte carretero, registrando 9,181 casos de robo, de los cuales 7,862 fueron violentos.
Las pérdidas financieras derivadas de estos robos afectan directamente a los hombres-camión, a las empresas transportistas y a las aseguradoras, contribuyendo al incremento de los costos de traslado y, en última instancia, al aumento de los precios para el consumidor final.
El 2023 reflejó un aumento del 27% en comparación con el año anterior, y mayo se destacó como el mes más violento con 732 víctimas contabilizadas.
Las cifras específicas por estado muestran que el Estado de México lidera con 4,214 robos, seguido por Puebla con 2,589, y Michoacán con 687.
La Asociación Mexicana de Empresas de Seguridad Privada e Industria Satelital (AMESIS) informó que, del total de robos en carretera, el 98% afecta a vehículos pesados de transporte de mercancías.
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La AMESIS destaca que el robo de mercancías en tránsito está influenciado por factores globales, incluyendo la crisis económica, la erosión de la cohesión social, el cibercrimen y el narcotráfico.
Ricardo Bustamante Medina, presidente de la AMESIS, señaló que el narcotráfico ha visto en el transporte una nueva “fuente de ingresos”, desviando incluso la actividad de los “huachicoleros” hacia el robo de camiones de carga.
Zonas de riesgo
La concentración del delito se observa en la región centro del país, con el Estado de México liderando con un 28%, seguido por Puebla con un 22%.
En promedio, se registraron 56 robos de carga por día en México, con un alarmante 82% atribuido al jamming debido a la falta de aplicación de medidas por parte de las autoridades.
En cuanto a las mercancías más afectadas, abarrotes ocuparon el 31% de los robos, seguidos por acero con un 27%, calzado con un 15%, y mercancías diversas con un 20%.
A nivel latinoamericano, la AMESIS y otras organizaciones informan que el robo de camiones de carga también ha impactado en Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica y Perú, con un aumento en la variedad de métodos utilizados por los grupos delictivos.
Ante este panorama, la AMESIS busca nuevas alianzas con autoridades estatales y federales para implementar medidas como paraderos seguros, certificación de operadores y nuevas leyes que beneficien a los sectores del autotransporte y de geolocalización.
El sector se encuentra en alerta, buscando soluciones conjuntas para combatir esta creciente amenaza.