China endurece medidas de seguridad nacional, afectando a Intel, Micron y Tesla
La Asociación de Seguridad Cibernética de China ha señalado que las CPU de Intel presentan vulnerabilidades que representan riesgos graves para la seguridad nacional.
China reforzó sus medidas de seguridad nacional, impactando directamente a gigantes tecnológicos estadounidenses como Intel, Micron y Tesla.
En particular, la Asociación de Seguridad Cibernética de China ha señalado que las CPU de Intel presentan vulnerabilidades que representan riesgos graves para la seguridad nacional.
Estas acusaciones, junto con otras acciones relacionadas, ponen de manifiesto las crecientes tensiones entre China y Estados Unidos en medio de la disputa por el control de la tecnología.
En 2023, Micron también fue objeto de una investigación por parte de las agencias de ciberseguridad de China, lo que llevó a su director ejecutivo a buscar un enfoque conciliador con visitas frecuentes a ese país.
Sin embargo, esta situación ha sido aprovechada por empresas locales como ChangXin Memory Technologies (CXMT) y Yangtze Memory Technology Corp (YMTC), que han avanzado en sus estrategias de sustitución de productos extranjeros.
Endurecería medidas
Las represalias podrían no terminar ahí, ya que China amenaza con implementar una “estrategia Python”, que restringiría las operaciones de empresas estadounidenses en su mercado, como respuesta a las sanciones y aranceles impuestos por Estados Unidos en el sector de semiconductores y vehículos eléctricos.
Por otro lado, Tesla podría ser el siguiente objetivo de estas medidas, ya que las agencias de seguridad han insinuado que una “Empresa extranjera A” está bajo vigilancia por incumplimientos potenciales. Tesla China ha asegurado que opera conforme a las normativas locales, pero el clima de incertidumbre se mantiene.
En el panorama más amplio, China ha avanzado considerablemente en el desarrollo de su propia tecnología, con empresas como Loongson, Zhaoxin y Huawei liderando el camino en sectores clave como procesadores y sistemas operativos, lo que refleja su determinación de reducir la dependencia tecnológica de Estados Unidos.
Este endurecimiento de las políticas de seguridad nacional envía un mensaje claro: las empresas extranjeras que no se alineen con las regulaciones y prioridades de China podrían enfrentar serias consecuencias en un mercado donde la política y la tecnología están estrechamente entrelazadas.