El 57% de 226 gerentes de centros de datos empresariales en distintas industrias planea aumentar el uso de las coubicaciones.
La elección entre construir un nuevo centro de datos y arrendar espacio en un centro de datos existente dependerá de la situación específica de la empresa, sus necesidades actuales y futuras, así como su capacidad financiera.
En muchos casos, las empresas optan por un enfoque híbrido, utilizando una combinación de centros de datos propios y servicios de centro de datos externos para lograr un equilibrio entre control, flexibilidad y costos.
Una encuesta realizada por Vertiv a 226 gerentes de centros de datos empresariales en industrias como servicios financieros, educación, fabricación, salud, gobierno y telecomunicaciones en Estados Unidos mostró que el 57 % de los participantes planeaba aumentar el uso de las coubicaciones en los próximos 24 meses.
Las razones que motivaron su decisión fueron que las coubicaciones ofrecen la flexibilidad de actuar rápidamente y a un bajo costo, la posibilidad de aprovechar las constantes mejoras de la industria y la centralización del acceso a las redes en la nube.
La ampliación del mercado de coubicaciones y el inicio de la construcción de centros de datos nuevos son las dos tendencias que coinciden en el ámbito de las inversiones en centros de datos en Latinoamérica.
Estas tendencias están impulsadas por la digitalización cada vez mayor de las economías de la región y la creciente necesidad de servicios en la nube para reforzar el proceso de la transformación digital.
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Mercado incremental
Los resultados de un estudio de Report Linker destacan la gran influencia de los gigantes de servicios en la nube como Microsoft, Google, Amazon Web Services (AWS), Oracle, IBM y Tencent en impulsar la demanda de servicios de coubicaciones en la región. Además, el estudio subraya que el máximo en el ancho de banda de los datos y la creciente necesidad de computación de alto rendimiento están obligando a los operadores de centros de datos a invertir en infraestructura eficiente para hacer frente de forma efectiva a los periodos de inactividad.
El aporte de estos proveedores de servicios de hiperescala es uno de los contribuyentes con la tasa de crecimiento anual compuesto (CAGR) proyectada del mercado de coubicaciones en Latinoamérica del 6,15 % entre 2022 y 2027.
Otros factores desencadenantes son la creciente digitalización en la mayoría de países y el crecimiento de la conectividad, de acuerdo con Report Linker.
Estos grandes protagonistas han anunciado a lo largo de 2021 y 2022 el desarrollo de ambiciosos proyectos de construcción de centros de datos en la región, como:
- La región de centros de datos de Microsoft en Querétaro, México;
- Las nuevas zonas de infraestructura de nube de AWS en Argentina, Chile y Colombia;
- Inversiones de Google en cables submarinos, las nuevas regiones para Google Cloud y la ampliación de su centro de datos en Chile;
- La instalación de la IBM Cloud Multizone Region en Brasil.
La opción para el sector empresarial
Como se mencionó anteriormente, la respuesta a la pregunta de construir data centers nuevos o arrendarlos está muy relacionada con el tipo de compañía, su actividad principal y su función en la transformación digital.
Cuando la actividad principal de la compañía no es ofrecer servicios de procesamiento de datos y almacenamiento, ni soluciones en la nube, la opción de arrendar espacio en las instalaciones de coubicaciones podría ser más viable en términos financieros. Esto se debe a que las coubicaciones ofrecen un diseño de infraestructura estandarizado, topologías claras, una implementación más rápida, gestión de proveedores y elevados niveles de seguridad, lo cual les concede a las compañías una mayor viabilidad económica.
6 aspectos a considerar
La decisión de si una empresa debe construir nuevos data centers o arrendar espacio en centros de datos existentes depende de varios factores y no existe una respuesta única que sea aplicable a todas las situaciones. Aquí hay algunas consideraciones clave que pueden influir en esta decisión:
1. Costos iniciales y de capital: La construcción de un nuevo centro de datos suele requerir una inversión significativa de capital. Esto incluye la compra de terrenos, la construcción de instalaciones, la adquisición de equipos y la contratación de personal especializado. Por otro lado, el arrendamiento de espacio en un centro de datos existente generalmente implica costos iniciales más bajos.
2. Flexibilidad y escalabilidad: Arrendar espacio en un centro de datos puede proporcionar flexibilidad para aumentar o reducir la capacidad según las necesidades de la empresa. Esto puede ser beneficioso en entornos empresariales que experimentan cambios rápidos. La construcción de un centro de datos propio puede limitar la flexibilidad y requerir una inversión inicial en capacidad que podría no utilizarse completamente de inmediato.
3. Tiempo y velocidad de implementación: La construcción de un nuevo centro de datos lleva tiempo, desde la planificación hasta la construcción y la puesta en marcha. El arrendamiento de espacio en un centro de datos existente permite una implementación más rápida, lo que puede ser importante si la empresa necesita soluciones de TI rápidamente.
4. Experiencia y especialización: Los proveedores de centros de datos especializados tienen experiencia en la gestión de instalaciones y la seguridad de los datos. Al arrendar espacio en un centro de datos, puede beneficiarse de la experiencia de profesionales especializados en la gestión de estos entornos críticos.
5. Control y seguridad: Construir su propio centro de datos brinda un mayor control sobre la infraestructura y la seguridad de los datos. Sin embargo, esto también conlleva una mayor responsabilidad en términos de gestión y cumplimiento normativo.
6. Costos operativos a largo plazo: Al comparar los costos a largo plazo, debe tener en cuenta no solo los costos iniciales, sino también los costos operativos continuos. El arrendamiento de espacio en un centro de datos puede implicar costos de arrendamiento continuos, mientras que la construcción de un centro de datos propio implica costos operativos adicionales, como energía, refrigeración, mantenimiento y personal.