No hay ninguna acción preventiva de parte de las autoridades a ninguno de los tres niveles de gobierno, alerta.
Con la llegada de nuevas inversiones y un proceso de digitalización de pequeñas empresas proveedoras, México apunta a tener una supercarretera de información.
Pero, carece de regulación, de policías y hasta de reglamento en su tránsito, advirtió David Taboada, presidente del Consejo de Seguridad de la Información y Ciberseguridad (CONSEJOSI).
“Estamos en un estado de indefensión, no solamente porque no hay ninguna acción preventiva de parte de las autoridades a ninguno de los tres niveles de gobierno.
“Ni siquiera hay una medición del tamaño del problema, aquí hay una cifra negra sobre la ciberseguridad, pero sólo sabemos que en México es muy grande“, destacó.
Ejemplificó el caso de una empresa regiomontana, que apenas hace unos meses enfrentó un ciberataque en el que le defraudaron 3.4 millones de dólares.
“No hay nadie a quién recurrir cuando el daño ya está hecho”, alertó el especialista.
Quien hablará mañana sobre el tema en el Foro Económico Fiscal, organizado por Instituto de Contadores Públicos de Nuevo León.
Las pérdidas por ciberataques a nivel global en el último año, explicó, arrojan cerca de 11.5 billones de dólares.
“Son 11.5 millones de millones de dólares, lo que en inglés serían trillones de dólares, mientras que el valor de mercado mundial de la ciberseguridad es de 335 mil millones de dólares.
“Una relación en la que los daños del cibercrimen cuestan 34.3 veces lo que se invierte en seguridad”, puntualizó.
Iniciativas de ley sin concretarse
Taboada dijo que a diferencia de otros países, México tiene una lamentable situación, al carecer de una Ley de Ciberseguridad, aunque haya cerca de 20 proyectos en el Congreso de la Unión.
El último de ellos, impulsado por el diputado Javier López Casarín, hasta ahora archivado como muchos otros.
Indicó que tanto las empresas como el gobierno han minimizado el problema, a pesar que la actual administración ha enfrentado fuertes ciberataques.
Señaló que las empresas en México están en un estado de indefensión.
Aún, cuando hay incluso cláusulas en el Tratado entre México, Estados Unidos y Canadá (T-MEC) relacionados con la ciberseguridad.