Video: Ratón Enmascarado; eTailers vs mayoristas tradicionales: ¿quién gana?
La competencia es sana para el mercado, pero no siempre para los jugadores que participan en la oferta, los eTailers son el ejemplo.
Los eTailers, esos monstruos digitales como PCEL; Intercompras; Grupo DECME, Cyberpuerta, Supermex, y otros, están haciendo su jugada maestra.
Se están colando por la puerta de atrás de los fabricantes, ¡y se llevan la mejor tajada del pastel!
¿Qué pasó con los mayoristas tradicionales, esos que durante años fueron los reyes del juego?
Están siendo ninguneados, como si fueran los extras en una película donde los protagonistas son estos gigantes digitales. Y claro, los fabricantes, felices, les dan todo lo que piden: exclusividad, mejores términos de crédito, ¡y hasta les planchan la ropa si es necesario!
Antes, durante la pandemia, pensábamos que estos arreglitos eran temporales. Pero no, compadre, aquí no se acabó la fiesta, ¡se quedó la resaca!
Ahora los eTailers no sólo quieren quedarse con esos privilegios, sino que exigen más. Así, las principales marcas están poniendo a los mayoristas tradicionales en la banca.
El cartel digital de los e-tailers
Este tipo de compañías no es cualquier competidor, ¡son un cártel digital!
Coordinados, organizados, a la vanguardia en tecnología, y con la mano bien metida en los bolsillos de los fabricantes, están obteniendo condiciones que rayan en lo ridículo. Imagínate, plazos de 120 días para pagar, devolución de productos después de 60 días sin penalizaciones, ¡y eso no es todo! Quieren precios garantizados, descuentos automáticos, como si el mercado fuera su tiendita de conveniencia.
Este nivel de control asfixia a los mayoristas tradicionales, que ya ven cómo sus márgenes se hacen cada vez más pequeños, bajando a menos del 3%. A ese nivel, ¡ni para el café!
¿Y qué pasa? Muchos están tirando la toalla, ya que muchos canales ahora prefieren comprar a través de estos nuevos jugadores.
El negocio mayorista, en la cuerda floja
¿Y qué hacemos con los mayoristas? ¡Están en una crisis existencial! Mientras ven cómo sus márgenes se evaporan, las malas prácticas internas también están haciendo daño. Los ejecutivos de algunas de estas empresas están más preocupados por salvar su pellejo que por salvar el negocio. Sin una estrategia clara, están dejando que el barco se hunda mientras los eTailers recogen los escombros.
¡La alerta está encendida!
Esto no es cualquier crisis, señoras y señores, es una disrupción total del ecosistema de distribución. Si no se toman medidas, los mayoristas van a desaparecer, y los eTailers van a consolidarse como los únicos actores importantes. Y claro, eso significa que ellos van a dictar las reglas del juego. Al final, los fabricantes van a estar tan atados a ellos que ya no habrá competencia. ¡Un monopolio digital disfrazado de conveniencia!
Así que, pónganse truchas. Si los mayoristas tradicionales no reaccionan, van a ser cosa del pasado, como el Betamax o las cabinas telefónicas. Es hora de que el sector se despabile y entienda que si no se adaptan, los eTailers se los van a tragar enteritos, sin siquiera dejar una migaja.