Súper humanos, grandes atletas, exigencia y perfección. Así se concibe a los competidores de Tokio 2020, pero estos juegos han demostrado que no hay que tratarles como robots.
Súper humanos, grandes atletas, exigencia y perfección. Así se concibe a los competidores de Tokio 2020, pero estos juegos han demostrado que no hay que tratarles como robots.