Las empresas tecnológicas y de comunicaciones en México han intensificado sus esfuerzos para crear entornos seguros y equitativos, donde la inclusión no es solo un discurso, sino una estrategia de negocio.
El 28 de junio se celebra el Día Internacional del Orgullo y la industria de tecnología y comunicaciones en México se encuentra en un momento clave para reflexionar sobre su papel en la construcción de espacios laborales inclusivos y diversos. El sector, históricamente marcado por dinámicas de homogeneidad, ha comenzado a transformar sus prácticas para responder a la necesidad de integrar a personas con distintos gustos, identidades y orientaciones, reconociendo que la diversidad es un motor de innovación y competitividad.
En 2021, en México, 5.1 % de la población de 15 años y más declaró una orientación sexual o identidad de género LGBTI+, esto de acuerdo con la ENDISEG 2021.
Panorama actual: avances y ejemplos
Las empresas tecnológicas y de comunicaciones en México han intensificado sus esfuerzos para crear entornos seguros y equitativos, donde la inclusión no es solo un discurso, sino una estrategia de negocio. De acuerdo con Computrabajo, cada vez más organizaciones implementan políticas de diversidad y equidad, conscientes de que atraer y retener talento diverso impulsa la creatividad y la resiliencia de los equipos.
“Las empresas tienen la oportunidad de liderar con el ejemplo. La diversidad y la inclusión no deben concebirse como iniciativas temporales, sino como pilares esenciales para construir organizaciones sostenibles, humanas y exitosas, reconociendo que atraer y retener a los colaboradores más capacitados, sin importar su origen, identidad o contexto, es clave para impulsar la innovación y el crecimiento empresarial”, destacó Alejandra Martínez, responsable de Estudios del Mercado Laboral en Computrabajo.
Entre las acciones más destacadas en el sector se encuentran:
- Diagnósticos internos constantes, a través de encuestas de clima organizacional y auditorías de diversidad, para identificar áreas de mejora desde la experiencia de los colaboradores.
- Programas de capacitación continua sobre sesgos inconscientes, lenguaje incluyente y liderazgo inclusivo, dirigidos especialmente a líderes y áreas de recursos humanos.
- Políticas claras y beneficios equitativos, como cláusulas antidiscriminación, licencias parentales igualitarias y seguros médicos diversos, que reflejan un compromiso real con la equidad.
- Espacios de representación, mediante comités de diversidad y grupos de afinidad para mujeres, personas LGBTQ+, personas con discapacidad y grupos étnicos, fortaleciendo la cultura organizacional y la participación activa.
- Coherencia entre el discurso y la práctica, asegurando que la inclusión sea una realidad cotidiana y no una acción limitada a fechas conmemorativas.
Lecciones regionales y casos de éxito
El caso de Henkel, empresa global con presencia en Latinoamérica, ilustra cómo la inclusión puede traducirse en políticas concretas: licencias parentales equitativas sin importar género u orientación sexual, programas de mentoría y beneficios adaptados a la diversidad familiar. El enfoque de Henkel puede servir de referente para el sector tecnológico y de comunicaciones local.
Las cifras muestran que la comunidad LGBTIQ+ tiene una alta participación en actividades profesionales y artísticas, sectores donde la creatividad y la innovación son fundamentales. Este dato resalta la importancia de abrir espacios en la industria tecnológica mexicana para aprovechar el potencial de talento diverso.
Impacto de la diversidad e inclusión en la productividad empresarial
- Estudios internacionales recientes (McKinsey, Deloitte, Gallup) confirman que empresas con políticas claras de diversidad e inclusión tienen hasta un 36% más de probabilidades de superar a sus competidores en rentabilidad y pueden aumentar la productividad en un 21% y la satisfacción laboral en un 27%.
- Las empresas con equipos diversos tienen un 25% más de probabilidades de superar financieramente a sus pares y un 19% más de ingresos por innovación.
Retos y recomendaciones para el futuro
A pesar de los avances, persisten desafíos para lograr una inclusión auténtica en la industria mexicana de tecnología y comunicaciones. Entre los principales retos se encuentran la necesidad de:
- Superar la brecha entre discurso y acción, asegurando que las políticas inclusivas se reflejen en la experiencia diaria de los colaboradores.
- Garantizar la representación efectiva de personas con distintos gustos, identidades y orientaciones en todos los niveles de la organización.
- Promover una cultura de respeto y pertenencia, donde la diversidad sea vista como una fortaleza y no como un obstáculo.
Para avanzar en los próximos años, se recomienda:
- Implementar diagnósticos periódicos y transparentes sobre el estado de la inclusión en las empresas.
- Fortalecer los programas de sensibilización y capacitación, especialmente en temas de género, orientación sexual y accesibilidad.
- Crear mecanismos de denuncia y acompañamiento efectivos para casos de discriminación o exclusión.
- Fomentar alianzas con organizaciones de la sociedad civil y redes profesionales que impulsen la diversidad en el sector.
La industria de tecnología y comunicaciones en México tiene la oportunidad de liderar el cambio hacia una sociedad más justa e inclusiva. Reconocer y celebrar la diversidad, especialmente en el marco del Día Internacional del Orgullo, no solo es un imperativo ético, sino una estrategia inteligente para construir empresas más innovadoras, resilientes y exitosas. El reto está en pasar del discurso a la acción, asegurando que la inclusión sea un valor vivido todos los días, en beneficio de todas las personas.