Los canales necesitan asociarse con empresas que los escuchen activamente y les ofrezcan herramientas alineadas con sus prioridades reales.
En los últimos años, brindar ciberseguridad se ha convertido en un diferenciador clave para los canales que buscan crecer en un mercado cada vez más desafiante. De acuerdo con datos de Kaspersky, en 2024 las empresas mexicanas enfrentaron más de 42 millones de ataques cibernéticos, y en Latinoamérica el total alcanzó los 268 millones. Si bien este panorama es retador, también representa una enorme oportunidad para que, con especialización y acompañamiento, el ecosistema de canales mejore su rentabilidad y se consolide como un aliado estratégico en ciberseguridad.
En este entorno, donde los modelos de negocio cambian constantemente y la competencia exige una agilidad cada vez mayor, los canales necesitan asociarse con empresas que los escuchen activamente y les ofrezcan herramientas alineadas con sus prioridades reales. No se trata solo de vender soluciones de seguridad digital, sino de construir relaciones sólidas, donde los socios de canal cuenten con el respaldo necesario para enfrentar los retos del mercado y capitalizar nuevas oportunidades.
Para ello, deben asegurarse de que sus aliados los provean con una estructura regional bien diseñada. Esto implica que les brinden productos adaptables a cada contexto local, soporte técnico y comercial en el idioma adecuado, así como un conocimiento profundo de las amenazas que sus clientes pueden enfrentar en cada mercado, algo fundamental en un mundo donde los riesgos en ciberseguridad pueden variar dependiendo de factores tan concretos como la infraestructura tecnológica o el nivel de digitalización de cada país. Esa cercanía marca la diferencia. Cuando las propuestas comerciales reflejan el entorno, se transforman en oportunidades tangibles de crecimiento, fidelización y protección, tanto para los canales como para sus clientes finales.
En mi experiencia, el compromiso real con nuestros socios de canal va más allá de brindarles soluciones tecnológicas, se trata de darles acceso a los recursos necesarios para hacer crecer sus negocios. Esto incluye capacitación continua, programas de especialización y, sobre todo, esquemas que simplifiquen su operación y mejoren su rentabilidad. Este acompañamiento integral no solo responde a las necesidades inmediatas del ecosistema de canales, sino que también lo prepara para afrontar el futuro con visión estratégica y una relación sólida con sus aliados.
Y es precisamente ahí donde se construye lo más valioso de esta relación: la confianza. No solo en las empresas, sino en la solidez de las soluciones y el respaldo constante que ofrecemos. Cuando estamos verdaderamente alineados con las prioridades del canal, la satisfacción y la lealtad de nuestros socios se convierten en el testimonio más claro de que vamos en la dirección correcta.
En definitiva, la evolución constante del mercado de ciberseguridad exige una flexibilidad que permita ofrecer propuestas comerciales adaptadas a las necesidades locales. Escuchar a nuestros socios y responder con soluciones relevantes no es sólo una buena práctica, sino una estrategia esencial para construir relaciones duraderas, satisfactorias y de mutuo beneficio. Al enfocarnos en sus necesidades, logramos no solo mejorar la ciberseguridad, sino también fortalecer todo el ecosistema de negocios que depende de nuestras soluciones.
Jaime Berditchevsky es director general para México en Kaspersky
